Decidir para complacerse: hágase estas preguntas

Bienvenidos de nuevo a la Red Social de las Terapias Naturales alternativas y complementarias. En el día de hoy seguiremos con una serie de consejos naturales para cuidar nuestra mente de forma saludable, mediante técnicas psicológicas. Seguimos con el artículo base »tomar decisiones correctas» para plantearnos otra pregunta que nos hará saber si realmente el camino que vamos a escoger es acorde con una buena decisión. Para ello antes de elegir debemos de preguntarnos… ¿Es esta una elección que hago para complacerme a mí o a los demás?… ¡vamos allá con este artículo y con el Podcast!.

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Tener el control de la situación

Poder controlar nuestra vida significa usar nuestra confianza, instinto y habilidades innatas, que nos permiten saber que es lo que más nos conviene. Esto implica pasar por alto la necesidad que a veces tenemos de complacer a la sociedad o a nuestro entorno más inmediato. Debemos de respetarnos.

Cuando utilizamos nuestro instinto y confianza, y por lo tanto tomamos el control de nuestra vida mediante esas decisiones, actuamos con valentía y sin la ayuda de nadie (en el sentido de elegir), saliendo de lo conocido para adentrarnos en lo desconocido, en nuestra propia película.

Cómo crear la vida de tus sueños

Una vez que sabes lo que quieres obtener en el futuro, y si no lo sabes te lo explico en este artículo, tienes que empezar por tomar las decisiones que te acerquen a él. Esto solo lo puedes conseguir con unos cimientos sólidos, y estos a su vez son las decisiones tomadas por la propia persona y no por influencias de terceras. De otra forma… ¿cómo podrías tener unas cimientos sólidos si la persona que decide por ti o en la que basas tus decisiones desaparece?. Por lo tanto podemos ver de nuevo como tomar las decisiones basadas en nuestros pensamientos y no en los demás nos aporta una base de cara al futuro.

En ocasiones, cada vez que intentamos complacer a otras personas, olvidamos realmente quienes somos y andamos a la deriva de aquí para allá. Para ser y actuar en relación con nuestra personalidad debemos de observar y aceptar nuestros puntos fuertes y débiles sin tener en cuenta lo que digan las demás personas. Así, cunado no actuamos conforme a nuestros ideales debemos de saber que estamos anteponiendo las necesidades de algo o alguien a las nuestras.

Podríamos entenderlo de forma errónea como un cierto grado de egoísmo, pero nada más lejos de la realidad ya que para dar amor a los demás, primero hay que amarse y actuar conforme a nuestra personalidad. Nadie será feliz a tu lado si tu no lo eres, por mucho que antepongas las necesidades del resto.

¿Qué debemos de hacer?

Lo primero de todo es hacernos la pregunta… ¿Es esta una elección que hago para complacerme a mí o a los demás?. La forma de responderla es haciendo caso a nuestro instinto o a esa voz que te habla de vez en cuando. Si estás dando los primeros pasos por el camino elegido, pero sientes que tu instinto te dice que no es viable, que no es buena idea o que te estás alejando, quizás la respuesta a la pregunta sea que estás complaciendo a los demás. Evidentemente, lo mejor es realizarse la pregunta antes de elegir, pero también vale para aquellos caminos que ya hemos elegido.

Por otro lado tienes que tener en cuenta que quizás esa voz que te susurra puede ser la del miedo, la de la famosa zona de confort, que no quieres que hagas nada diferente. Así que… ¿cómo diferenciar si es tu sabiduría o el miedo?. Para ello tendrás que leer el artículo base »toma de decisiones» en el cual hablamos de las necesidades del inconsciente. Por ejemplo, podemos tener la necesidad de ser actriz o actor, pero sin embargo también tenemos la necesidad inconsciente o subconsciente de tener seguridad. Podemos ver que no concuerdan ambas necesidades y aunque veamos como la respuesta a la pregunta ¿Es esta una elección que hago para complacerme a mí o a los demás? sea satisfactoria, es decir, que lo hacemos por nosotras/os, también tendremos una voz que nos dice que no, la referente a la necesidad de estar seguros la cual nos engañará. Por tanto, lo primero de todo será encontrar esas necesidades y satisfacerlas para que no nos confundan, como muestro en este artículo base de »tomar decisiones».

Complacer a los demás

Llegado el punto, creo que hemos entendido como el complacer a los demás no es la mejor forma de llevar al exponente nuestras vidas. Sin embargo, es algo muy arraigado en nuestra cultura. Por ejemplo, veníamos del colegio corriendo para enseñarle esa buena nota a nuestros padres que tendrían una gran satisfacción o teníamos buenos comportamientos para complacer al entorno. Todo se basaba en un sistema de »hazlo así y me alegraré».

Evidentemente cuando crecemos todo eso cambia. Empezamos a sentirnos cansados al actuar por obligación o condiciones, y entonces nos empieza a gustar expresarnos con sinceridad, sin tener en cuenta la opinión o el »qué dirán» de los demás. Por lo tanto, cuando actuamos en favor de los demás, nos comemos por dentro poco a poco. Con el fin de llegar a buen puerto, no permitas que las obligaciones externas condicionen tus acciones. Para ser consciente de que actúas conforme a tus propios pensamientos, una vez más pregúntate: ¿Es esta una elección que hago para complacerme a mí o a los demás?.

Ejemplo práctico

He tenido en consulta muchas oportunidades de ver como las personas erraban en sus decisiones por el motivo de no hacerse a si mismas/os la pregunta: ¿Es esta una elección que hago para complacerme a mí o a los demás?. A continuación os ilustraré un caso de estas características.

En una ocasión, una pareja decidió tomarse unos días de respiro para despejar la mente. Así, todo iba bien y a la mañana siguiente, cuando ella se despertó en aquel Hotel Rural el teléfono de su pareja sonó. El lo cogió y respondió a un viejo amigo que pasaba por allí y no veía desde hacía años. Le pidió a ella que si le importaría desayunar con él y su amigo. Ella respondió que no había problema, pero en realidad sabía que no iba a poder realizar las actividades que tenía previstas en la mañana. Así, actuó en favor de los demás y no en favor de sí misma. Por esta razón estuvo de mal humor todo el día y su error fue no hacerse la siguiente pregunta antes de elegir: ¿Es esta una elección que hago para complacerme a mí o a los demás?.

CONCLUSIONES

Antes de elegir, debemos de tener en cuenta una serie de preguntas, como por ejemplo »¿Es esta una elección que hago para complacerme a mí o a los demás?». Sin embargo, en primer lugar debemos de ponernos manos a la obra y escribir:

  • Nuestros puntos fuertes y débiles.
  • Nuestro futuro a conseguir (lee este artículo si no sabes lo que quieres: apartado crear tu futuro)
  • Detectar nuestras necesidades inconscientes (leer este artículo para detectar necesidades inconscientes: apartado la lucha entre nuestras metas y las del inconsciente)
  • Y por último, hacernos una serie de preguntas como la de este capítulo que nos aclararán la idoneidad de nuestras elecciones.

Gracias por estar en FutuGreen, la Red social de las Terapias Alternativas, Naturales y Complementarias. Esperamos haber sido de ayuda en el cuidado natural de vuestra mente y vuestras elecciones. ¡Comparte en tus Redes Sociales para ayudarnos a seguir expandiendo el mundo natural dándole a los Botones Sociales!.

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